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Acerca del Dinero
Acerca del Dinero
- Golpe de Estado en Estados Unidos
La Reserva Federal
Por
Stephen Lendman


Publicado en este sitio web el 2 de Abril
del 2.007.
Tomado de:
http://www.zmag.org/content/showarticle.cfm?ItemID=10501
.
Original en Inglés, traducción al Español por Germán Leyens (Tlaxcala), editado por Luis Prada (con correcciones en la traducción y la adición de texto no traducido.)
Original en Inglés, traducción al Español por Germán Leyens (Tlaxcala), editado por Luis Prada (con correcciones en la traducción y la adición de texto no traducido.)
Los sucios secretos de la Reserva Federal de
los EE.UU. (FED)
y los bancos que manejan el mundo. ¿Por qué existe la inflación? ¿Quién produce dinero de la nada
y lo presta con intereses? ¿Quiénes fueron los hombres que se reunieron en un
absoluto secreto en la isla de Jekyll para crear la
FED?
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Hace años leí el excelente libro
de William Greider, publicado en 1.987,sobre el funcionamiento del Sistema de la
Reserva Federal de EE.UU.. Detallado y explícito, es una lectura maravillosa e
informativa, con la excepción de
la solución que sugiere para un inmenso
problema. Fue, por lejos, demasiado tímido.
Greider llamó su libro “Secrets of the Temple”
["Secretos del Templo"]. Este artículo trata de
resumir lo que hace, cómo lo hace, a quien beneficia a costa de quienes. Para
los que no están al tanto, prepárense para informaciones y comentarios
sorprendentes.
Aclaremos algo desde el inicio.
La Reserva Federal de EE.UU., el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón y el Banco
Central Europeo (de los 12 países europeos que adoptaron la moneda común europea
en 1.999) son instituciones con un poder enorme, mucho más allá de lo que puede
imaginar la gente en algún sitio del mundo.
Éstos muy dominantes de todos los bancos centrales también, como la mayoría de
otros, tienen una influencia poderosa en las condiciones financieras en
virtualmente todos los países incluyendo sus propios, por supuesto, en un mundo
financiero incrementalmente sin fronteras en donde un evento económico
significativo en una nación puede afectar la mayoría de las otras para mejor o
peor.
Otro poderoso banco forma también
parte del mundo financiero actual. Hay que mencionarlo por su importancia,
aunque requiere un artículo separado para explicar de modo más completo cómo
trabaja. Es el Banco de Pagos
Internacionales (BIS,
por sus siglas en inglés),
hermético, inviolable y sin responsabilidad ante
nadie, fundado en 1.930 y basado en Basilea, Suiza.
Este banco, del que la mayor parte de la gente jamás ha oído hablar, es
el banco central para sus bancos centrales miembros
—una especie de “mandamás
de mandamases” bancario, equivalente a lo que al parecer existe en el enigmático
mundo de los Dones de la Mafia. La
mayoría de los demás bancos centrales, incluyendo a la Reserva Federal
(explicado más adelante), es de PROPIEDAD PRIVADA de sus miembros.
Algunos académicos y otros que han estudiado el
BIS creen que la élite dominante del capitalismo
financiero estableció este banco de bancos para que esté en la cima del poder a
fin de que ejerza su autoridad sobre un sistema financiero mundial poseído y
controlado por ella AL ESTILO FEUDAL.
La idea es que esa súper-elite quiere regir el mundo, y que estableció
ese todopoderoso banco de bancos supranacional para que así lo hiciera.
Tan importante como eso es, esa discusión permanece para otro tiempo ya que la
intención de este artículo es enfocarse solamente en la Reserva Federal de los
EE.UU.
Los bancos centrales dominantes y
el
BIS, junto con la mayoría de los otros, ejercen su
influencia en una alianza mutua de tipo cartel para asegurarse que todos se
beneficien más de lo que harían si
no fuera por ese confortable arreglo.
Con su inmenso poder no es juego de palabras decir que estas instituciones
financieras de seguro gobiernan al mundo. Porque son capaces de crear
dinero, financian las necesidades de sus gobiernos, sus militares y toda la
actividad de negocios que no podría funcionar sin un suministro listo de ése muy
necesitado de todos los artículos. Es el dinero, no el amor, lo que hace
que el mundo gire, y los bancos centrales tienen el poder de crear o remover de
circulación tanto o tan poco de él como ellos escojan y por cualesquiera
propósito que tengan en mente. Esa clase de poder puede remover montañas o
destruirlas.
Ningún banco
central nacional es más poderoso en la actualidad que la Reserva Federal de
EE.UU.,
pero no fue siempre así, y ahora enfrenta competencia por el primer lugar, lo
que no había conocido desde la Segunda Guerra Mundial.
La FED, como lo llaman, ha existido desde que fue establecido
originalmente por una ley del Congreso en 1.913. Pero el Banco de Inglaterra ha
existido desde que Bretaña controlaba los mares, desde 1.694, cuando el Rey
William III necesitó ayuda para financiar el tipo de aventura que requiere mucho
dinero disponible
—la guerra. El
Banco de Inglaterra no fue el primer banco central, pero fue el primer banco
central de propiedad privada del mundo moderno en un país poderoso.
Se llamó el Banco de Inglaterra para impedir que el público supiera que,
igual que nuestra Reserva Federal, era y sigue siendo de propiedad privada y NO
parte del gobierno.
Fue el modelo usado en la formación de nuestro propio banco central y el de la
mayoría de los otros.
Los británicos
pueden haber tenido un adelanto de 219 años en arrancar la FED, pero los
banqueros centrales son solamente tan poderosos como los países que ellos
representan y sus economías. Hoy los anteriormente dominantes británicos deben
zanjarse por un papel muchos menor como el ser sólo uno de muchos socios
juveniles de un
hegemón
estadounidense que emerge posterior a la Segunda Guerra Mundial como un poder
económico dominante del mundo. Lo es aún hoy en día, aún cuando algunos
increíbles expertos creen que este país puede haber visto y pasado su pico y
está ahora en declinación.
Algunos van más allá y claman que nuestra declinación ha sido acelerada por las
políticas desastrosas de la administración Bush que irracionalmente cree que el
hacer sin fin la guerra en el mundo es la manera de gobernarlo, de promover el
crecimiento económico y el dominio sin fin, y por tanto de preservar la posición
preeminente de la nación como el campeón de la economía reinante.
Es fácil retar
esa visión y pensar que el campeón se ha trepado al ring demasiadas veces, tiene
planes interminables para más compromisos de regreso, y es probable que
encuentre el mismo destino que muchos de los anteriores humanos tuvieron quienes
no sabían cuando retirarse y terminar con su crónico daño cerebral conocido como
demencia. La lección de la historia es siempre la misma. El precio de un
comportamiento temerario es alto, doloroso e inevitable. Es verdad para
los países también como para los individuos, pero demasiado frecuentemente
ninguno lo ve hasta que es demasiado tarde. La más grande diferencia entre los
EE.UU. de hoy y las otras naciones en el pasado que les costó caro por no ceder
cuando su día había pasado es que tenemos un arsenal todo poderoso que otros
nunca tuvieron. Si decidiéramos usarlo, probablemente no habría mucho
dejado atrás para un sucesor. No un pensamiento placentero sino uno muy
real.
- EL CARTEL DE BANCOS
Todo
Comenzó
en 1910 en la
Isla Jekyll...
Suena como el título de una
película de horror, pero los eventos de la vida real que ocurrieron en 1.910 en
esta isla de propiedad privada a poca distancia de la costa de Georgia hicieron
que el Terror se convirtiera en Realidad para los seres del Planeta Tierra.
En la isla de Jekyll se reunieron
en secreto durante nueve días siete hombres muy acaudalados y poderosos y
crearon el Sistema de la Reserva Federal que nació tres años más tarde, el 23 de
diciembre de 1.913 mediante una ley del Congreso.
Desde entonces, la nación
norteamericana y el mundo NUNCA
volvieron a ser lo mismo, sólo se beneficiaron los ricos y poderosos.
La Ley de la Reserva Federal que
le dio origen es seguramente una de las obras legislativas más desastrosas para
el bien público que jamás haya sido producida por un organismo legislador.
También puede haber sido y sigue siendo ilegal según el Artículo 1,
Sección
8, de la Constitución que casualmente es la ley inviolable del país.
El artículo indica que el
Congreso tendrá el poder de acuñar (crear) dinero y de regular su valor.
Y, sin embargo, el Congreso actuó, por lo tanto, en violación de la misma
Constitución que juró preservar y al hacerlo creó el Sistema de Reserva Federal
que, como explicaremos más adelante, es una corporación privada con
fines de
lucro que opera a costa del bien público.
Mediante su acción, nuestros
legisladores cometieron fraude contra el pueblo del país y hasta ahora se han
salido con la suya sin que el público ni siquiera conozca el daño que se ha
infligido.
xxxxxxxxxxxxxxxEl vergonzoso resultado es que lo
que jamás debería haber llegado a ver la luz es ahora la institución más
dominante del mundo, y todo debido a lo que
comenzó en una isla de propiedad
privada de nombre espeluznante.
Pero, si el Congreso hubiese
actuado responsablemente, la ley de creación de la FED jamás habría sido
promulgada. La legislación que la estableció fue tan dañina para el interés
público, que probablemente jamás habría sido aprobada si no hubiera sido
encauzada mediante una reunión del Comité Parlamentario de Conferencia
organizada en plena noche entre las 1.30 y las 4.30 AM (mientras dormía la
mayoría de los miembros del Congreso) el 22 de diciembre de 1913.La Ley fue
votada al día siguiente y aprobada a pesar de que muchos miembros del organismo
habían partido para sus vacaciones de Navidad y la mayoría de los que se
quedaron no habían tenido el tiempo necesario para leerla o conocer su
contenido.
¿Suena familiar? Pues la
aprobaron (como un ladrón en la noche) y fue convertida en ley por un Woodrow
Wilson [presidente
de los
EE.UU. en aquel tiempo] inconsciente o cómplice, que admitió
posteriormente que había cometido un terrible error, diciendo “Arruiné
inconscientemente a mi país.”Es hora de que el público lo comprenda y comience a
exigir que se termine con más de 90 años de daño.
Esto casi ocurrió hace 43 años cuando un presidente decidió actuar a
favor de la gente que lo eligió. Ese
hombre fue John Fitzgerald Kennedy, quien planificó antes de su muerte el fin
del Sistema de Reserva Federal para eliminar la deuda nacional que un banco
PRIVADO crea al imprimir dinero y
prestárselo al gobierno. Esa deuda
ha aumentado ahora ESPECTACULARMENTE y
tiene que ser pagada por
todos los contribuyentes. Este
servicio de la deuda es ha enriquecido a los banqueros (de eso se trataba) y ha
empobrecido al público. No es
exagerado decir que se trata del mayor fraude financiero en la historia del
mundo que aumenta con cada día que pasa.
La deuda era menos onerosa hace 40 años, pero Kennedy comprendió el
peligro que representaba para el país y la carga que imponía al público.
Por lo tanto, el 4 de junio de 1.963, dictó la orden presidencial EO 11110
dando autoridad al presidente para emitir moneda.
Luego ordenó al Tesoro de los EE.UU. que imprimiera 4.000 millones de dólares en
“Notas o Billetes de EE.UU.” para reemplazar las notas de la Reserva Federal. Su intención era
reemplazarlos todos cuando hubiera suficiente cantidad de la nueva moneda en
circulación para poder terminar con el Sistema de la Reserva Federal y el
control que daba a los banqueros internacionales sobre el gobierno de
los
EE.UU. y el
público. Sólo meses después de la
entrada en vigencia del plan Kennedy, fue asesinado en Dallas en lo que
seguramente fue un golpe de estado disfrazado para verse de otra manera y muy
bien puede haber sido llevado a cabo al menos en parte para salvar al Sistema de
la FED y la concentración
de poder que ella creó que era tan productivo para los poderosos banqueros en el
país.
Los que se beneficiaban tenían
buenos motivos para involucrarse en la conspiración para proteger el privilegio
especial al que no estaban dispuestos a renunciar sin lucha. Es una
explicación plausible que puede explicar quien ha estado detrás del asesinato y
por qué razón.
Cualesquiera sea la verdad, el cartel bancario estuvo solamente en angustia por
poco tiempo.
Es una explicación plausible que
podría explicar quién puede haber estado tras el asesinato y por qué motivo. Sea
cual sea la verdad, el cartel bancario sólo se vio afligido por poco tiempo.
Una vez que el vicepresidente,
Lyndon Johnson, se hizo cargo, rescindió la orden presidencial de Kennedy y
restauró el antiguo poder del cartel.
Se ha mantenido desde entonces y es ahora, por supuesto, más poderoso que nunca.
Aún los presidentes son incapaces de pararlo y aquéllos quienes trataran tienen
una lección de la historia para ponerlos a ellos en pausa.
Representaban a algunos de los hombres más poderosos del mundo - los Morgan,
Rockefeller, Rothschild de Europa (que dominaron toda la banca europea a
mediados del Siglo XIX y que todavía podrían ser la familia más rica y poderosa
de todas) y otros de gran influencia y poder.
Estaba también un senador de EE.UU., un alto funcionario del Tesoro, el
presidente del mayor banco del país en la época, un destacado personaje de Wall
Street y el hombre que más tarde llegaría a ser el primer presidente del Sistema
de la Reserva Federal. Fue una
colección extraordinaria y fueron para lograr una sola cosa.
Querían cambiar la ideología y el curso de los negocios que hasta
entonces se basaban en la competencia
y reemplazarlos por el MONOPOLIO.
Como dijo el barón M. A. Rothschild :“Denme el control sobre la moneda de
una nación y no me importa quién haga sus leyes.”
Conocían también la sabiduría de lo que se dice en Proverbios 22:7:
““El rico se enseñorea de los pobres; y el que toma prestado es siervo
del que presta”.
Fue el alba de la
era de los carteles poderosos, cuando los siete titanes financieros reunidos en
secreto en la casa del club de la isla decidieron no seguir compitiendo entre
ellos y exigieron el poder para arreglarlo.
Querían un cartel bancario y obtuvieron uno que hoy florece por debajo
del radar público con el instrumento que más deseaban - la capacidad de
controlar el suministro de dinero de la nación, que les dio un poder casi
ilimitado. El cartel trabaja ahora
en cooperación con sus gobiernos y con todas las demás poderosas corporaciones
transnacionales en una alianza global dominante que les permite controlar los
mercados, los recursos, la mano de obra barata del mundo, y nuestras vidas.
El Sistema de la Reserva Federal No Es una Agencia del
Gobierno - Es un Cartel de Propiedad Privada de Bancos Poderosos Protegidos por
la Ley.
El gobierno NO tiene ningún control sobre la
FED. A
menudo se habla de un banco central descentralizado, casi-gubernamental, pero es
sólo una cobertura para disfrazar lo que es en realidad: un cartel de propiedad
y operación privada que es presentado como si el gobierno estuviera a cargo.
Comúnmente se
cree pero es falso que el Sistema de la Reserva Federal es una función del
gobierno y sujeta a su control. Falso. Es a menudo referido como un
banco central cuasi gubernamental y descentralizado, pero eso es justamente una
cubierta para disfrazar lo que, de hecho, es realmente: un cartel mantenido y
operado privadamente hecho para que se vea como que el gobierno está encargado
de él. El hecho de que tiene sus cuarteles generales en
Washington
en el
edificio
formidable y de vista impresionante
Eccles
(nombrado por un anterior presidente de la FED) es sólo parte de un astuto
subterfugio. Aquí está cómo trabaja:
La FED está compuesta de un
Consejo de Gobernadores en Washington y de 12 bancos regionales en las
principales ciudades de todo el país (incluyendo a mi propia ciudad de Chicago
donde cualquiera solía poder, pero ya no puede, ir a un cajero y comprar valores
del Tesoro de EE.UU.). El sistema
también incluye a numerosos y diversos bancos miembros, incluyendo a todos los
bancos nacionales que TIENEN que
formar parte del sistema. Se permite
también que otros bancos se sumen y muchos lo hicieron. La Reserva Federal
comenzó sus operaciones en noviembre de 1914.
Recibió mandato legal para poseer el mayor poder de cualquier institución
del país- el poder de crear y controlar su suministro de dinero.
La mayoría de la gente sabe poco
o nada sobre el dinero y la banca, probablemente nunca piensa en el tema, y no
tiene la menor idea de cómo lo que hacen la FED y los banqueros afecta sus
vidas.
Antes de
escribir este artículo, yo tenía u poco más que un modesto conocimiento que
aprendí en un curso de requisito sobre el tema y contabilidad básica como parte
del currículum de mi maestría en administración de negocios
[MBA]
hace
46 años.
Esos cursos dejaron
por fuera las partes más
importantes de la historia y nunca han dado a entender que pudiera haber algo
siniestro en el funcionamiento real del sistema bancario.
Pero nadie debería imaginar que los bancos fueron establecidos para
funcionar en su beneficio o que se quisiera que lo hicieran.
Evidentemente no es así, y todo el que
sugiriera que lo es, debería leer lo que sigue.
Son tan beneficiosos para el
bienestar público como lo fue el misil balístico intercontinental MX Peacekeeper
(el lenguaje ingenioso es impresionante) que debía portar ojivas nucleares a
mediados de los años ochenta y que tenía el poder de destruir toda vida en el
planeta y que aún podría hacerlo en su forma antigua o modernizada.
El Acta de la
Reserva Federal
de 1.913 estipula que los Bancos de la
Reserva Federal de cada estado
[EE.UU.] son de propiedad de sus bancos
miembros.
Esos bancos de la FED son corporaciones de propiedad privada que hacen un
gran esfuerzo por ocultar que ellos, en realidad, son dueños de lo que gran
parte del público piensa que forma parte del tesoro y gobierno públicos.
Es fácil pensarlo ya que los presidentes de la FED y siete de los doce
gobernadores son nombrados por el presidente y aprobados por el Senado.
Como tal, el BRF es una especie de entidad casi-gubernamental, pero el
hecho es que el Sistema es de propiedad privada con fines de beneficio privado
como cualquier otra empresa. Tiene accionistas como otras corporaciones
públicas, que reciben un 6% de intereses libres de riesgo cada año sobre su
participación en el capital. El público podría molestarse aún más si supiera que
algunos de los propietarios de nuestra Reserva Federal son poderosos
inversionistas extranjeros del Reino Unido, Francia, Alemana, Holanda e Italia.
Son socios de gigantescos bancos
de
los
EE.UU. como JP Morgan Chase y Citibank así como de poderosas firmas de Wall
Street como Goldman Sachs en un cartel banquero del nuevo orden mundial que
influencia y afecta por doquier los negocios y nuestras vidas.
El problema de la propiedad privada de los bancos de la Reserva Federal
ha sido cuestionado
en
varias
ocasiones en los tribunales federales.
Cada vez las cortes defendían el sistema actual bajo el cual cada Banco de la
Reserva Federal es una corporación poseída por los bancos comerciales en su
región. Uno de tales casos fue el de Lewis versus Los Estados Unidos que
fue decidido por el 9o Circuito de la Corte de Apelaciones que
reguló que los Bancos de la Reserva son corporaciones independientes, de
propiedad privada y controladas localmente.
Nuestros
Padres Fundadores Tenían Ideas Diferentes a las de los Poderosos Hombres que se
Reunieron en la Isla de
Jekyll
A través de nuestra historia,
hubo desacuerdo sobre quién debía controlar el suministro de la moneda de la
nación y el derecho de emitirla.
Los
Padres
Fundadores
[de la nación americana,
N.
del
T.] comprendieron que el parlamento británico se vio
obligado a imponer impuestos injustos a sus colonias americanas y a sus propios
ciudadanos porque el Banco de Inglaterra había acumulado tanta deuda que el
gobierno necesitaba ingresos para reducirla.
Benjamín Franklin, de hecho, consideraba que fue la verdadera causa de la
Revolución Americana. La
mayoría de los Fundadores también entendieron el peligro que pudiera resultar de
la mucha riqueza y poder acumulados de los banqueros. James Madison, el
principal escritor del bosquejo de nuestra Constitución los llamó los
"Cambiadores de Dinero", refiriéndose a la Biblia que dice que Jesús dos veces
sacó a los Cambiadores de Dinero del Templo de Jerusalén hace 2.000 años.
Madison
dijo:
"La
historia registra que los Cambiadores de Dinero han usado cada forma de medios
posibles de abuso, intriga, engaño y violencia para mantener sus control sobre
los gobiernos mediante el control del dinero y su emisión."
Thomas Jefferson
fue justamente tan fuerte en su condenación cuando dijo: “Creo
sinceramente que las instituciones bancarias son más peligrosas para nuestras
libertades que los ejércitos permanentes. Ya han creado una aristocracia del
dinero que ha desafiado al gobierno. El poder de emisión debería ser arrebatado
a los bancos y restaurado a
aquéllos a los que pertenece como corresponde.”
Jefferson y Madison comprendían los peligros de los monopolios
comerciales de todo tipo y trataron de asegurar que nunca existirían en la nueva
nación.
Ellos, de hecho, querían que se añadieran dos enmiendas adicionales a la
"Declaración de Derechos" en la Constitución pero nunca lo lograron. Ellos
creían que para proteger la libertad del pueblo la nación debería tener
"libertad de los monopolios en el comercio" (lo que son ahora las
corporaciones gigantes incluyendo a los grandes bancos internacionales y las
firmas inversionistas del Wall Street) y "la libertad de un ejército permanente"
o ejércitos en pie.
Tratemos de imaginar cómo
sería el país en nuestros días si Jefferson y Madison lo hubieran logrado - un
país sin gigantescas corporaciones depredadoras que explotan a todos para
obtener beneficios y sin fuerzas armadas desenfrenadas que hacen guerra al
mundo, amenazando con destruirlo, y que lo hacen para que esos gigantes
corporativos puedan obtener beneficios aún mayores.
Nunca lo lograron, por cierto, y la gente lo ha pagado caro desde
entonces. Ha sido peor todavía desde
los años ochenta, porque el poder de la FED aumentó bajo un presidente
republicano amigo, y la algarabía dirigida por los medios corporativos ocultó el
efecto. Para ellos,
no es permitido que la
FED sea degradada en público, así como
sus gigantescos bancos miembros o sus aliados de Wall Street.
Las cosas se descontrolaron especialmente durante el ejercicio de Alan
Greenspan. Sorprende que haya habido quien encontrara muchos motivos para
elogiar a semejante presidente de la FED antes de que dirigiera la FED, cuando
fue asesor presidencial, o durante el período en el que la dirigió.
Sólo entró al servicio gubernamental después del fracaso de su firma de
consultoría financiera, probablemente porque necesitaba una nueva línea de
trabajo. Allí se las arregló para convertirse en un exuberante profeta de la
banca central que fue casi elevado a la santidad por los expertos en los
negocios que pensaron que bajo su ejercicio los cielos fueron sólo azules y que
las pocas nubes a la vista siempre presagiaban que volvería a brillar el sol.
Ahora Alan se retiró a los horizontes más fértiles de los contratos
literarios y de las conferencias, lo que muestra que si trabajas bien para los
ricos y poderosos que te lo permitieron, (a costa del resto de la gente),
serás muy bien remunerado
al final. Es probable que el nuevo presidente de la FED ha tomado nota y
debidamente tratará de seguir la tradición que lo precedió-
Pero trate de
imaginar un tipo diferente de presidente de la FED, uno que supiera, creyera y
practicara las palabras y la sabiduría de otro presidente Americano de algún
renombre -
Abrahán Lincoln.
En
1.886 Lincoln dijo: “Los poderes del dinero se alimentan de la nación en tiempos
de paz y conspiran contra ella en tiempos de adversidad. Son más despóticos que
un monarca, más insolentes que la autocracia y más egoístas que una burocracia.
Denuncian, como enemigos públicos, a todos los que cuestionen sus métodos o
saquen a la luz pública sus crímenes. Tengo dos grandes enemigos: el Ejército
del Sur frente a mí y los banqueros detrás. De los dos, el que está atrás es mi
mayor enemigo.”
Parece que Lincoln
hubiera
también dicho (aunque algunos lo
cuestionan): “Veo que se acerca en el futuro cercano
una crisis que me inquieta y que me hace temblar por la seguridad de mi país…
se han
entronizado
las corporaciones y seguirá una era de corrupción en los
lugares altos, y el poder del dinero del país se
dedicará a
prolongar su reino
al trabajar sobre los prejuicios del pueblo
hasta
que
toda
la
riqueza
es agregada en unas pocas manos y
la República sea destruida.” Imaginemos lo que Lincoln diría
hoy.
Dado
el
sentimiento que Lincoln tenía por los
banqueros y por el poder del dinero en el país, parecería suplicar la pregunta
obvia,
¿tuvo algo que
ver, o fueron la razón de su prematura muerte a manos de John Wilkes Booth?
Los banqueros internacionales
claramente
detestaban a Lincoln después
de que logró que el Congreso aprobara
el Acta de Ley de
Moneda de Curso Legal
en 1.862
que
autorizó al Tesoro de
los EE.UU.
a emitir papel moneda llamado “Greenbacks” ["respaldos
verdes"].
Lincoln necesitaba esa legislación después de que
declinó pagar a los
banqueros las tasas usureras de interés de entre un 24
a un 36% que
ellos
exigían por
los préstamos que necesitaba para financiar su guerra con el
Sur. Con la nueva
ley bancaria, Lincoln pudo imprimir los millones de dólares necesarios,
los cuales eran
libres
de deuda y de intereses. Esto no era,
claramente, lo que deseaban los
codiciosos banqueros, ya que sólo pueden sacar beneficios cuando arrebatan su
trozo de carroña de las transacciones financieras que controlan.
Lincoln fue asesinado
justo
después
de que la guerra terminara, y un poco más
tarde
de que la llamada ley de los Respaldos Verdes fue rescindida,
fue
pasada
una
nueva
acta
bancaria
nacional, y todo el dinero llegó a ser
de nuevo cargado de interés.
Cómo
Funciona el Sistema de la Reserva Federal
El Sistema de la Reserva Federal
resulta de que el Congreso y el Presidente aceptaron PRIVATIZAR el sistema
monetario de la nación y renunciar al poder que debería hacer seguido siendo el
derecho exclusivo del gobierno. Esa
ley fue tan escandalosa que la FED tuvo que ser estructurada deliberadamente
para que pareciera una delegación del gobierno federal a fin de ocultar que en
realidad es un cartel bancario todopoderoso de propiedad privada cuyos bancos
miembros (incluyendo todos los estatales) comparten los vastos beneficios
obtenidos de poseer la licencia más importante que debiera ser exclusiva de los
gobiernos.
El derecho a imprimir dinero en
cualquier cantidad, controlar su suministro y precio, y beneficiarse
inmensamente de prestarlo a cambio de un beneficio, incluyendo al propio
gobierno que debe pagar intereses por el dinero, lo que nunca sería necesario si
simplemente lo imprimiera. Pensemos
en lo que ocurriría si el gobierno legalizara el derecho a falsificar la moneda
nacional para beneficio privado. No es una exageración afirmar que es la mayor
estafa financiera de todos los tiempos, que causa un daño incomprensible a un
público que sigue sin enterarse y Funciona como sigue:
La FED tiene la autoridad de
dirigir la política monetaria de la nación con el poder de controlar el
suministro y el precio de la moneda. Tiene tres maneras de hacerlo:
- Mediante operaciones abiertas
de mercado,
la tasa de referencia que cobra
a los bancos miembros, y
el requerimiento del porcentaje
de reserva de los activos de los bancos miembros que se les exige que mantengan
en su poder y no sea prestado. El
Consejo de Gobernadores tiene la responsabilidad del manejo de la tasa de
referencia y de los requerimientos de reserva, mientras que el Comité Federal de
Mercados Abiertos (FOMC, por sus siglas en inglés) está a cargo de las
operaciones de mercado abierto de compra o venta de obligaciones que explicamos
más adelante. Mediante el uso de
estos instrumentos, la FED puede influenciar el suministro y la demanda de
dinero y así controla directamente la tasa a corto plazo de los fondos federales
que es siempre fija a menos que la FED desee elevarla o bajarla. Las tasas a
mayor plazo son controladas por los poderosos negociantes institucionales en el
mercado de obligaciones.
El FOMC y Cómo Trabaja
El FOMC y
cómo funciona El Comité Federal de Mercados Abiertos (FOMC) es realmente la
clave de todo el proceso de creación o contracción de dinero.
Consiste de 12 miembros - siete miembros del Consejo de Gobernadores de
la FED, el presidente del
Banco FED de Nueva York
[New York FED Bank] (el más importante de todos) y
cuatro de los restantes 11 presidentes del Banco de la Reserva que sirven por
turnos, períodos de un año. El FOMC
realiza ocho reuniones regularmente programadas por año para evaluar las
condiciones económicas y decidir lo holgada o estricta que ha de ser la política
monetaria para impulsar su objetivo declarado de un crecimiento económico
sostenible y de estabilidad de los precios.
Literalmente, el FOMC tiene el poder de crear dinero DE LA NADA.
Lo hace mediante un proceso de cuatro etapas:
-Primera etapa: El FOMC aprueba
la compra de obligaciones del gobierno de
los
EE.UU. en el mercado abierto.
-Segunda etapa: El New York FED Bank adquiere las obligaciones a los vendedores (los mercados financieros siempre tienen un número idéntico de compradores y vendedores).
-Tercera etapa: La FED paga por sus compras con créditos electrónicos a los bancos vendedores que, por su parte, acreditan las cuentas bancarias de los vendedores. Estos créditos son literalmente creados DE LA NADA.
-Cuarta etapa: Los bancos que reciben los créditos pueden entonces utilizarlos como reservas para posibilitar que presten hasta 10 veces su suma (si su requerimiento de reserva es de un 10%) mediante la magia (que sólo poseen los bancos) de la banca de reserva fraccional y, ADEMÁS ,¡¡cobran intereses por el total. ¡Qué negocio! y todo es legal. Imaginemos cuán ricos podríamos ser todos si pudiésemos hacer lo mismo como individuos privados. Pedimos prestado un millón a la FED, como por arte de magia lo multiplicamos por 10, y cobramos intereses sobre el total, con la excepción de un 10% que debemos mantener en reserva. Es la magia de la creación de dinero de la reserva fraccional y explica cuán poderoso es el estímulo económico cuando la FED quiere realzar el crecimiento económico.
-Segunda etapa: El New York FED Bank adquiere las obligaciones a los vendedores (los mercados financieros siempre tienen un número idéntico de compradores y vendedores).
-Tercera etapa: La FED paga por sus compras con créditos electrónicos a los bancos vendedores que, por su parte, acreditan las cuentas bancarias de los vendedores. Estos créditos son literalmente creados DE LA NADA.
-Cuarta etapa: Los bancos que reciben los créditos pueden entonces utilizarlos como reservas para posibilitar que presten hasta 10 veces su suma (si su requerimiento de reserva es de un 10%) mediante la magia (que sólo poseen los bancos) de la banca de reserva fraccional y, ADEMÁS ,¡¡cobran intereses por el total. ¡Qué negocio! y todo es legal. Imaginemos cuán ricos podríamos ser todos si pudiésemos hacer lo mismo como individuos privados. Pedimos prestado un millón a la FED, como por arte de magia lo multiplicamos por 10, y cobramos intereses sobre el total, con la excepción de un 10% que debemos mantener en reserva. Es la magia de la creación de dinero de la reserva fraccional y explica cuán poderoso es el estímulo económico cuando la FED quiere realzar el crecimiento económico.
Cuando la FED desea contraer la economía reduciendo el suministro de
dinero, simplemente invierte el proceso mencionado. En lugar de comprar
obligaciones, las vende de manera que el dinero sale de las cuentas de los
bancos compradores en lugar de ingresar en ellas. Entonces, los préstamos
bancarios tienen que ser reducidos 10 veces si el requerimiento de reserva es de
un 10%.
Cómo la FED
Daña el
Interés
Público
El sistema de la Reserva Federal existe sólo para servir a sus
propietarios Y a los bancos miembros y al
hacerlo es hostil al interés público. Eso, porque es un cartel bancario con el
poder de restringir la competencia por mayores beneficios obtenidos a nuestra
costa. Sale de nuestros bolsillos, a los de ellos, y el público pierde de cuatro
maneras:
Primera: A través del impuesto
invisible de la INFLACIÓN que resulta de la dilución del poder adquisitivo
causado por el ingreso al sistema de dinero recién creado, lo que reduce el
valor de los dólares que ya están presentes.
La FED de Greenspan fue especialmente expansiva, nunca fue
responsabilizada por sus excesos y pudo legar el serio problema que creó a un
futuro presidente de la FED y a la sociedad, para que lo encararan. El hombre al
que ahora ensalzamos como mago monetario comenzó de modo sensato.
Desde 1982, antes de que llegara en 1987,
hasta 1992, el suministro de dinero aumentó en un promedio de un 8% por año.
Pero de 1992 a 2002, las imprentas trabajaron horas extra en
sincronización con la desregulación y el crecimiento de los mercados globales,
expandiendo la moneda en más de un 12% por año. Se hizo aún más extremo después
del 11-S y desde 2002 creció a una tasa de un 15%. Ahora se ha más que duplicado
en menos de una década. Parece que el nuevo presidente de la FED tomó nota y ha
comenzado a reducir el ritmo de expansión monetaria ya que sigue aumentando la
tasa de los fondos federales a cualquier nivel que tenga en mente.
Los operadores cambiarios también parecen haber tomado nota del ritmo de
la expansión general del suministro de dinero. Con la excepción de un descanso
en 2005, es bastante probable que la debilidad del dólar desde 2002 sea el
resultado del exceso creado por los gastos derrochadores del gobierno de Bush
para financiar sus interminables guerras y sus insensatos recortes tributarios
para los ricos. El problema se
complica aún más ya que desde 1964 hasta la actualidad, el servicio de la deuda
ha crecido de un 9 a un 16,5% del presupuesto federal, y sigue aumentando, y el
actual déficit ha pasado de un superávit de un 1% a casi un 7% de déficit; el
endeudamiento federal ha crecido en un 40% sólo desde 2001 y ha sido financiado
en gran parte por “la gentileza de extranjeros” que podrían estar perdiendo los
nervios. Además, desde marzo de
2006, la FED dejó de publicar la suma M-3 del monto total de dólares en
circulación. Sin esa transparencia,
ahora los grandes compradores de obligaciones del Tesoro de
los
EE.UU. tienen que
calcular el valor del dólar basándose en la especulación y la inseguridad en
lugar de datos seguros - no es algo que inspire confianza en los mercados
financieros que funcionan mejor en una atmósfera de franqueza y claridad.
Segunda: El público también pierde porque el cartel bancario puede
practicar la usura - por su poder sobre una moneda flexible para aumentar o
bajar ARTIFICIALMENTE las tasas a
cualquier nivel que escoja lo que muchos pequeños prestamistas no pueden hacer
en un mercado verdaderamente libre y abierto.
Además, la dominación sobre el mercado por el cartel fuerza a la mayoría
de los prestatarios (especialmente los más pequeños que están en menos
condiciones de emitir sus propios instrumentos de deuda) a pedirle préstamos que
luego puede hacer utilizando lo que debería ser el dinero de la gente, puesto a
su disposición al coste más bajo posible por numerosos pequeños prestamistas
fuertemente regulados por el gobierno, que competirían en busca de clientes.
Tercera: Mediante los impuestos, nosotros, el público, tenemos que pagar
para cubrir los intereses de la inmensa deuda nacional (actualmente de más de
8,4 billones de dólares) acumulada del dinero imprimido por la FED y prestado al
gobierno. Como dijera anteriormente, totaliza ahora un monto anualizado que
excede dos tercios de un billón de dólares y aumenta a diario. Ha enriquecido a
los banqueros, empobrecido a la gente de a pie, y el público todavía no se
entera de que está siendo esquilmado brutalmente.
Cuarta: Exacerbando el abuso mencionado, el cartel puede hacer que el
público saque de apuros al sistema con más dólares del contribuyente. Esto
sucede cada vez que alguno de los bancos, demasiado grandes para que se permita
que fracasen, necesita ayuda financiera para sobrevivir.
Lo mismo vale para grandes corporaciones como Chrysler o Lockheed,
grandes firmas inversionistas o fondos
de cubrimiento o compensación
como
los de Administración de Capital a Largo Plazo
[Long-Term Capital Management] o
incluso países como México. También vale cuando cierra un solo banco y hay que
compensar a los depositantes o, de modo más serio, después de una crisis
financiera sistémica como la que acabó con muchos bancos de ahorros y préstamos
en los años ochenta. Sea un solo
banco o muchas docenas al mismo tiempo, los dólares tributarios del público son
utilizados para salvar el sistema o sólo para pagar la cuenta a fin de rembolsar
a depositantes asegurados contra pérdidas por el seguro de protección
gubernamental hasta un cierto monto por cuenta.
¿Cómo
Habría
Reaccionado
Adán
Smith
Ante el Sistema de la Reserva Federal?
Esta concentración de riqueza y poder del cartel bancario es lo contrario
de lo que Adam Smith, el padrino ideológico del capitalismo de libre mercado,
propugnó en sus escritos, incluyendo su obra fundamental “La Riqueza de las
Naciones”. Smith escribió sobre una “mano invisible” que dijo funcionaba mejor
en un mercado libre con numerosos pequeños negocios en competencia local los
unos contra los otros. Se opuso
enérgicamente al mercantilismo CONCENTRADO
de su época (lo que haya sido) que actualmente sería el equivalente de
nuestras gigantescas corporaciones transnacionales y el cartel bancario con el
poder para restringir la competencia, mantener precios más elevados de lo que
hubiera sido posible de otro modo y, como resultado, ganar mayores beneficios a
expensas del público.
El tipo de
cartel bancario que existe hoy en día es precisamente lo que Smith habría
condenado. Pero que haya un banco
central no es un mal de por sí siempre que el banco sea de propiedad del
gobierno, controlado y operado en función del bien público.
Sólo aparece un problema cuando establecen el banco mediante subterfugios
para que parezca como si fuera de propiedad del gobierno y operado por éste,
cuando en realidad, funciona en función del interés privado como en nuestro caso
y también en la mayoría de los otros.
Y en EE.UU., para que funcione el amaño, el Sistema es dirigido por un
organismo rector nombrado en su mayoría por el gobierno, que actúa como un
alcahuete para los miembros privados del codicioso cartel de la banca que fue el
primero en desear que existiera y que logró que un Congreso corrupto lo pusiera
a su disposición. Para que funcione, el cartel precisa de la cobertura que
consigue como resultado de su asociación con el gobierno, pero perjudica al
interés público gracias a esa estructura en provecho de sus propias ganancias
privadas.
Y así llegamos al quid del problema: el Congreso elegido para servir al
pueblo, lo traicionó en lugar de cumplir con su deber al crear un cartel
bancario todopoderoso y otorgarle la autoridad para practicar la banca de
reserva fraccional con el poder de obtener dinero libre creándolo de la nada.
Luego permitió a sus miembros un derecho de casi-monopolio para
establecer las tasas de interés que deseen cobrar a los prestatarios. Todo el
proceso equivale a un atraco legalmente sancionado por parte de los poderosos
bancos que operan confabulados con el gobierno para obtener sus propios
beneficios. Forma también parte de
un proceso más amplio organizado por el gobierno para TRANSFERIR
riqueza del pueblo a los bolsillos de las grandes corporaciones y de los
ricos
y haciéndolo mientras que aquéllos que eran dañados no eran conscientes de que
estaba sucediendo aún.
Otra Manera en que el
Sistema de Reserva Federal
Daña al
Público
La FED daña el bien público de otra manera importante: El Sistema de
Reserva Federal fue supuestamente establecido para estabilizar la economía,
limar asperezas de los ciclos de la coyuntura, mantener una tasa saludable de
crecimiento sustentable mientras conserva la estabilidad de los precios y
beneficia a todos. ¿Ha hecho bien su trabajo?
Desde su creación en 1.913, hemos tenido loas
quiebras de 1.921 y
la más
importante y recordada de 1.929. Fue seguido por la Gran Depresión que duró hasta
el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, la que según el destacado economista
conservador Milton Friedman fue causada y exacerbada porque la Reserva Federal
decidió sorprendentemente la reducción del suministro de dinero en tiempos de
contracción económica, en lugar de aumentarlo.
Luego tuvimos recesiones en 1.953, 1.957, 1.969, 1.975, 1.981, 1.990 y
en el
2.001.
También tuvimos comienzos de inflación en los años sesenta. Ésta fue
bastante severa durante gran parte de los años setenta y a comienzos de los
ochenta. Y tuvimos una importante
crisis bancaria en los años ochenta en la que quebraron más bancos y
asociaciones de ahorro y préstamos que nunca antes en nuestra historia. Sucedió
después de la desregulación del mercado financiero, al permitirse que los bancos
persiguieran sus propios intereses sin supervisión gubernamental que controlara
su inclinación a correr riesgos excesivos o que impidiera que trataran de
salirse con la suya mediante fraudes deliberados.
Junto con la estabilidad económica que la
FED nunca logró, también se ha
disparado la deuda de los consumidores; déficits presupuestarios y comerciales
de nivel récord; una cantidad elevada de bancarrotas personales y crecientes
delitos con préstamos hipotecarios; un interés sobre una creciente deuda
nacional que representa un porcentaje grande y creciente del presupuesto
federal; la pérdida de nuestra base manufacturera y de puestos de trabajo con
salarios elevados porque son exportados a países de baja remuneración.... una
economía en la que los servicios acaparan ahora cerca de un 80% de todos los
negocios que en su mayoría pagan mal, con trabajos menos capacitados con poca o
ninguna prestación; y una brecha en el aumento de los ingresos y la riqueza que
sigue dañando a las personas de bajos o medianos ingresos para beneficiar a los
pocos ricos y acomodados, así como un gobierno que impulsa esta situación.
Todo se sintetiza en una conclusión:
La mera cosa que falló en lograr la FED por sobre todo
fue por lo que estaba
establecida
para hacer en primer lugar. Pero es mucho peor
todavía, si comprendemos los verdaderos motivos de un cartel. No es servir el
interés público. Es abusar de él,
porque así aumentan los beneficios. Puede hacerlo con la concentración de su
poder, legalmente sancionado, y un gobierno amigo aliado con sus socios o
facilitadores.
Es desde ese arreglo confortablemente oculto a la vista que
puede
salirse
con
la
suya
con los más
grandes de los
espléndidos
robos.
Una Solución
Necesaria a un Inmenso Problema
Se desprende de la
información presentada que el Sistema de la Reserva Federal fue establecido
mediante el sigilo y el engaño por un puñado de políticos corruptos al servicio
de sus poderosos aliados de la banca y de Wall Street.
Lo hicieron para defraudar al público y sin que éste haya tenido la menor
idea de lo que sucedía, y de lo dañino que era para su bienestar e interés.
Los que estaban en el Congreso y el presidente Wilson (un hombre formado
en derecho, ex abogado practicante, antiguo académico apreciado y presidente de
la Universidad Princeton) o sabían o deberían haber sabido que la ley que él y
ellos aprobaron al establecer la FED estaba en violación directa de la Constitución que habían
jurado defender. No lo hicieron, y
violaron la ley, y el público pagó caro su crimen desde entonces hasta la
actualidad.
De manera que, ¿qué
recurso queda, y es posible movilizar a la gente para darle seguimiento? Hay una
sola solución sensata y justa para deshacer el daño que se ha hecho a tantos
durante tanto tiempo: abolir el Sistema de la Reserva Federal y restaurar el
poder que tiene actualmente a un Gobierno Federal que trabaje por el bien
público.
Recuperarlo del poderoso
cartel bancario que trabaja en su contra y no volver a permitir jamás que vuelva
a caer en sus manos. Es el único camino.
El gran poeta y dramaturgo alemán Bertolt Brecht habría estado de acuerdo
cuando dijo que “es más fácil robar estableciendo un banco que asaltarlo.”
La liberación del poder de esos poderosos “cambistas” traería enormes
beneficios para todos. Establecería
una política prudente de creación de dinero que Minimizaría
NUESTRO IMPUESTO
MAS INJUSTO - la INFLACIÓN
que es causada por banqueros privados en busca de beneficios que
manipulan el suministro de dinero de la nación para aumentarlos.
Estabilizaría la economía y suavizaría los extremos en el ciclo de la
coyuntura agudizados por el cartel que trabaja para su propio beneficio y contra
el nuestro. Reduciría el coste del dinero para los prestatarios porque
terminaría con el poder monopolista que tiene actualmente el cartel de
establecer las tasas que prefiere, abriendo el mercado a más competencia.
Reduciría la creciente y opresora deuda nacional al ser por fin liberada
del aumento del suministro de dinero requerido para pagarla. Reduciría la carga
tributaria para el público ya que se necesitarían menos ingresos para el
servicio de la deuda. Sería un paso trascendental hacia la reducción del poder
abrumador de todos los gigantes corporativos depredadores que nos explotan para
poder crecer y prosperar, y ojalá termine por eliminarlo.
Podría incluso servir de disuasión para evitar guerras que sólo se libran
para obtener riqueza y poder - nunca por la gloria o para que el mundo sea más
seguro para la democracia u otros motivos falsos. Sin un poderoso cartel
bancario y otros gigantes de la industria que viven de la miseria humana que
generan, habría menos necesidad de guerra alguna. Tratemos de imaginar ese tipo
de mundo y un gobierno que trabaje por el bien público en lugar de dañarlo como
lo hace ahora para servir al capital.
Ese mundo es posible, y la gente responsable tiene que trabajar por él,
porque el que tenemos actualmente ha fracasado y debe ser cambiado antes de que
sea demasiado tarde.
Una Visión del Mundo Creada por los Intereses de Capital y
por Nuestro Gobierno que lo Apoya
En el inquietante, corrupto mundo del capitalismo neoliberal de “libre
mercado” controlado por gigantescas corporaciones; que beneficia sólo a los
pocos y causa tanta miseria y
desesperación; un mundo despótico que no puede durar, ni debemos permitir que
dure mucho más; en el que interminables guerras por el poder y los beneficios;
en el que la GENTE ES
UNA MERCANCÍA
utilizada según se la necesita y descartada como basura cuando no es así;
sin preocupación por la preservación de una ecología capaz de sustentarnos, que
no lo seguirá haciendo por mucho tiempo más porque la estamos destruyendo, y a
nosotros mismos, por ganancias; en el que las necesidades humanas básicas no
tienen importancia bajo un modelo económico en el que sólo vale el beneficio
privado; en el que la democracia es incompatible con el capitalismo depredador;
en el que nadie debiera querer vivir o tener que hacerlo; en el que debemos
cambiar o morir. En el lenguaje del capital, es el balance final. Sólo un
movimiento de masas de gente comprometida puede cambiar ese mundo. Debe
o
acabaremos todos.
A menos que
nos podamos salir de nuestro modelo económico fallo a una alternativa mejor, él
terminará por su propia cuenta un día de una u otra forma. Pero puede ser
un desenlace que nadie desee, es su propia destrucción tomando a todo lo demás
con él ya sea por un holocausto nuclear o un ambiente tan inhóspito que no
soportará nuestra habilidad para vivir en él. Nuestra sola oportunidad es
trabajar para cambiarlo mientras que haya aún tiempo.
Una Visión de un Mundo Diferente
La historia prueba que un mundo
mejor es posible cuando hay gente comprometida que trabaja lo suficiente para
lograrlo. Así terminó la esclavitud; los trabajadores conquistaron el derecho a
organizarse y a la negociación colectiva; las mujeres lograron el mismo derecho
a voto que los hombres, el control sobre sus propios cuerpos, y más derecho y
condición en la fuerza laboral; los negros y otras minorías obtuvieron
importantes derechos cívicos; y los políticos estatuyeron importantes leyes
sociales aunque haya sido sólo por temor a lo que podría suceder si no lo
hacían.
Thomas Jefferson explicó que
“el precio de la libertad es la vigilancia eterna.” Es el mismo precio a pagar
para mantener nuestras conquistas sociales logradas con tanta dificultad. En la
generación pasada esas conquistas se erosionaron mientras no prestábamos
atención y sólo una acción de masas del pueblo puede rescatarlas.
El objetivo debería ser un mundo humano de participación en el que
las
vidas de la gente mejoran porque todos trabajamos juntos para lograrlo; un
mundo de paz y no de guerras interminables en beneficio de los ricos y poderosos
a nuestras expensas; en el que todas las necesidades humanas esenciales son
satisfechas porque los gobiernos trabajan por el bien común para asegurarlo; con
una democracia participativa real en la que los funcionarios públicos y elegidos
trabajan juntos para mantenerla fuerte y vibrante; sin gigantes opresores
corporativos o carteles bancarios porque la ley no los permite; en el que la
nutrición ecológica y la preservación constituyan una preocupación central; en
el que haya aire, agua, suelos puros y una alimentación adecuada y segura; un
mundo mucho más sencillo, con una base más local que la actual, en la que
nociones como la globalización ni siquiera formen parte del vocabulario; un
mundo basado en la equidad social y la justicia para todos, con gobiernos, el
mantenimiento del orden y los tribunales trabajando para asegurar que siga
siendo así; un mundo en el que todos queramos vivir y ojalá algún día lo
podamos; un mundo que queramos legar a futuras generaciones; un mundo que no
podamos dejar de lograr porque la alternativa puede ser la nada.
Puede que nos encontremos en un momento crucial en el que nuestro destino
está en juego. O trabajamos juntos por un mundo mejor, sustentable o
probablemente nos convertiremos en la primera especie que se autodestruye.
Si sucede, probablemente nos llevaremos a la mayoría de las demás con
nosotros y no dejaremos gran cosa para los pocos que queden. Ya no nos queda el
lujo de discutir el tipo de mundo que necesitamos para sobrevivir.
Los bancos gigantes y las corporaciones no nos lo brindarán, ni lo hará
un gobierno hostil aliado con ellos. Depende de nosotros que lo logremos o
probablemente sucumbiremos si fracasamos. Sería un buen comienzo si expulsáramos
de nuestro templo a los “cambistas” de la Reserva Federal y con ellos a las
corporaciones gigantes. Un mundo mejor es posible si recordamos y vivimos según
las palabras inspiradoras de Antonio Gramsci sobre “el optimismo de la
voluntad.” Con su ayuda, el pueblo organizado puede encontrar un camino para
derrotar al dinero organizado.
Stephen
Lendman vive en
Chicago
y puede ser localizado en lendmanstephen@sbcglobal.net. También visite su sitio
de blog en www.sjlendman.blogspot.com .
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